Con un pie en casa y otro en Senegal

Siempre me había dado miedo venir a Africa por el idioma.Si no me gustara tanto hablar posiblemente este miedo no existiría.

Antes de salir del espacio aéreo de España tuvimos un altercado que nos hizo tomar tierra en Málaga.

Surge de nuevo la tentación y se me presenta una oportunidad de huir.Pero ¿seré cobarde?.

Aclaro el incidente:Un hombre de nacionalidad francesa decidió entoñarse hasta tal punto que hubo que reducirle entre seis individuos,dos de ellos de la compañía aérea, para atarlo ya que la emprendía a golpes con el que le mirara raro,o sea con todo el mundo.

Nochecita en Torremolinos en el hotel Melia costa del Sol.

Estuve apunto de salir corriendo, pero el pundonor me hace seguir adelante.

Pero ¿como voy a poder hacer todo lo que tengo que hacer sin hablar francés?

El secreto estaba ahí pero yo no lo sabía.

Gracias a las personas que están trabajando para Médicos del Mundo todo se me esta haciendo menos duro.¡¡¡Uf!!!

De no ser por Nikole por Na y a las chicas de la oficina, no adelantaría pasitos para lo que parece un imposible:asistir a un parto con una matrona tradicional senegalesa.

Contento de haber llegado hasta aquí pero asustado de no poder conseguir, ¿de no poder conseguir que?¿un sueño, un deseo?¿Un objetivo, una obsesión?.Bueno lo que sea pero con el comecocos de no conseguirlo.

De todos modos lo que sea esta ya escrito en alguna parte y solo hace falta vivirlo.

En el centro de refuerzo nutricional para bebes del Niño Jesus en Velingara.

Pero antes de llegar, 

Bus nocturno hasta Tambacounda.7 horas.

Enlatado pero en ventanilla para llegar a Velingara.2 horas.

Pinchazo incluido.¡¡¡¡¡¡Por dios, Carlos,trata de arrancarlo!!!!!!

Por fin en casa.